¡Pues al final solo fuimos tres en la partida! Perico, Yulls y Ghostonio nos embarcamos en esta ruta por el Valle del Jerte y La Vera que tenía ya pensada hace tiempo y que cancelamos en una ocasión debido al tráfico por la fiesta del Cerezo en Flor. Algunos fuckis de vacaciones, otros por falta de tiempo y otros desganados (esperemos que sea pasajero) hicieron que en un solo coche cupiéramos los tres con bicis y todo.
Perico me recoge a las 7:30 y minutos después recogemos a Yulls. Dos bicis en el porta y la de Yulls en el maletero. Salimos a la autovía por Carrefour dirección Plasencia y a los pocos minutos vemos un desagradable incidente delante de nosotros: un ciervo joven cruza los dos carriles hasta el lado izquierdo y no puede saltar el quitamiedos que lo separa de la mediana. Frenamos a tiempo, pero un Golf negro nos adelanta y no lo ve. El animal asustado invade el carril izquierdo y el Golf lo embiste de lleno delante de nuestras narices...buffff. Fortísimo impacto, el bicho sale despedido junto con alguna pieza del parachoques, y va a darse contra el quitamiedos derecho. Pasamos a su lado, el animal pataleando inútilmente, roto. Espero que no durara mucho... El Golf para y vemos al conductor bajar a ver los daños mientras lo adelantamos.
Así que ya veis, menudo bajón para empezar el día, y qué pena nos dió el animal. Comentamos el incidente unos minutos y luego otros cuantos de silencio, realmente afectados por lo visto. Me queda la duda de si debimos parar, pero los ocupantes de coche estaban bien y con el ciervo no había nada que hacer. Creo que no lo volvimos a hablar en todo el día, quizá nos hubiéramos amargado el día con un mal recuerdo
Poco después de pasar Plasencia nos cruzamos con el grupo de unos 60-80 ciclistas que iniciaban la ruta organizada que había ese día. Al vernos con las bicis arriba se nos quedan mirando con cara de "éstos llegan tarde", pero vamos por libre, que pa eso somos fuckis
. En el Restaurante KM-4 preparamos los trastos ¡y en marcha! 10 km llanos nos vienen perfectos para calentar antes de afrontar la subida al Rabanillo, de unos 9 km. No se si es el nombre oficial del puerto pero lo llaman así. Cogemos el cruce a la derecha hacia Casas del Castañar y poco a poco las dos liebres se destacan. Puerto suave, subida muy bonita ( ¡creo que repetiré esto de "muy bonito" varias veces! ), rodeados de cerezos, robles y castaños. El fondo del valle va quedando abajo. A medio km de llegar al pueblo les veo a lo lejos entrando en él. Superado el pueblo me están esperando (también repetiré esto, me temo) y terminamos la subida del 8% por el tramo nuevo de carretera que yo no conocía. Bajamos y subimos la hondonada que hay justo antes de llegar a Barrado, donde también me están esperando. Pasamos la entrada al Mortirolillo y Barrado y seguimos hacia Arroyomolinos de la Vera por una carretera muy cómoda.Justo antes de Arroyomolinos está la Garganta Desesperada, con una fuerte subida de unos 4 km de la que ya os he hablado que va a dar a la carretera Jaraiz-Piornal. La tenía catalogada como la mas dura que he hecho, y es dura, con tramos del 15% y mas, pero ya no me pareció tan "terrible" como la otra vez que subí. En la primera rampa cambio tarde el plato ¡y encima me falla y no cambia! y tengo que echar pié a tierra mientras estos dos me gritan ¡pareces novatoooo!...y además ya se destacan los muy mamones, yo que quería aguantarles 100 metros ;-) ... La subida es dura pero con varios mini descansillos, y como no, muy bonita. Al final, después de un paso canadiense me esperan y bajamos dirección Pasarón y Jaraiz, cruzándonos con un par de ciclistas.
Dejamos Pasarón a la derecha y tras unas amplísimas vistas en las que se divisan las Villuercas y un poquito de subibaja llegamos a Jaraiz. Pasamos la Garganta de Pedro Chate, y llegamos a Cuacos de Yuste, el pueblo de mi madre, donde nos desviamos hacia el Monasterio de Yuste. ¡Parece que no pero esos 2 KM de subida pican! Paramos en el cementerio alemán donde charlamos con un paisano que conoce a mi familia materna, natural de Cuacos, y luego en el Monasterio para hacer unas fotos y comer, y seguimos hacia Garganta la Olla distante solo 5 KM. Ni que decir tiene que la subida es muy bonita -¡creo que ya voy a dejar de repetirlo!- envueltos por robles y grandes bloques de granito. Nos cruzamos con una corredora que no nos hace ni p... caso al saludarla, culpa según Perico de su buen par de t... ;-). Luego paramos en el mirador desde donde se domina Garganta. Para las fotos pienso en cederle el móvil a un tío que estaba allí, pero su mirada de psicópata me frena ¡Qué cara nos puso el tío! Durante el resto de la ruta lo llamamos ya así.
En Garganta necesitamos agua, y preguntamos a varios paisanos por una fuente, pero no tienen claro cual es buena y cual no. Acabamos en la fuente de la plaza del pueblo donde nos aseguran que es buena, y bebemos, repostamos y nos refrescamos un poco metiendo la cabeza bajo el chorro, ¡qué icaaaaaa! El cartel de "Piornal 17" nos indica el camino, 14 de subida cómoda y fácil salvo un par de kms al final algo mas duros. Los máquinas se rebajan al nivel de este simple mortal y hacemos casi toda la subida separados por solo unos metros. Si, lo habeis adivinado, muy muy bonita, con sombra y rodeados de robles casi todo el camino, algunos impresionantes. Solo al final Perico y Julio se destacan y me esperan a la entrada de Piornal.
Iniciamos la bajada a Valdastillas. Este fue el tramo que más disfruté. Las cubiertas Ultremo te dan mucha sensación de seguridad, aunque parecen un poco blandas y propensas a pinchazos, al menos en mi caso. Poco tráfico que me permitió trazar las curvas casi en plan motero hasta el pueblo, donde en vez de seguir la carretera nos desviamos cruzando la plaza para bajar por un camino local asfaltado que conozco. También vistas espectaculares, miles de cerezos cargados de fruta y un tramo muy empinado que debe ser jodido de subir. Llegamos a la fábrica de Kirst (licor de cereza), rodeada de camiones, y a la carretera del Valle.
Solo tenemos que recorrer unos metros para coger el siguiente desvío, que baja hasta el fondo del valle y sube a Rebollar y El Torno, nuestro último puerto, de unos 9-10 km. Al poco de empezar noto un amago de tirón en los isquios de las dos piernas ¡al mismo tiempo! y tengo que pararme a estirar. Creo que me enfrié bajando Piornal y al volver a apretar las piernas dijeron ¡ay ay ay ay! Retomo la marcha intentando no forzar esa parte y parece que voy bien. Viendo un conjunto de enormes bloques de granito en lo alto de de un cerro surgen teorías ridículas
de lo que parecen.Superamos Rebollar y la subida se endurece bastante, cosa que no esperaba. Tengo que parar otra vez a estirar, con lo que pierdo de vista a los compis definitivamente. Con mucho cuidado supero ese tramo duro de 2-3 km y poco antes de llegar a El Torno veo a los dos fieras que han tirado las bicis a la cuneta y ¡atacando un cerezo! ¡con tó el morro! Pues me paro también y joé qué pintaza tenían las cerezas... ¡Como nos pusimos! Unas fotos de los tres ladrones, y al levantar la bici suena un pssssss mosqueante. ¡Otra vez he pinchado estando parado! No lo entiendo, supongo que apoyé la rueda en algún pincho. Esto refuerza mi sensación con las Ultremo que decía antes: excelente agarre y ligereza pero blandas, espero que las nuevas que ya tengo con no se qué capa antipinchazos que traen mejoren esto. Cambiamos la cámara y subimos el trocito que nos quedaba hasta El Torno, repostamos agua en una fuente y para abajo mucho mas lento que en Piornal porque iba mosca con la rueda. Ya en la carretera del valle los 12 KM que nos quedaban hasta el coche pasan volando.
Al final una cervecilla con el bocata y unas fotos y video "porno" ;-) que ya habéis tenido la desgracia de ver, tomados a traición
En definitiva una ruta flaquera creo que difícil de superar en lo bonito. 120 Kms de subidas largas y suaves, subidas cortas pero duras y, sobre todo, fantásticos paisajes. Una delicia para la vista ¡y para el paladar! ver los cerezos cargados de cerezas rojísimas o casi negras, a punto de partir las ramas por el peso. El Valle y la Vera como siempre preciosos son lo más bonito que tenemos cerca ¡hay que ir más por allí! Creo que tanto Yulls y sus aperturas de DRS
como Perico quedaron satisfechos por todo, cosa de la que me alegro de verdad. Para el resto, pues ya la repetiremos cuando haya ocasión, pero esa vez que no veamos sufrir a ningún ciervo ni ningún otro bicho, por favor. Que los únicos bichos que suframos seamos los fuckis, y no mucho.¡Un saludo fuckis!
